La pareja de la víctima, un hombre de 34 años, fue detenido este domingo tras ser señalado como el presunto autor del crimen.
El crimen se produjo durante madrugada, alrededor de las 4, en una vivienda situada en calles 115 y 12, en dicho partido del sur del Gran Buenos Aires, donde la víctima, identificada como María Belén Muñoz (33), residía junto al ahora imputado, Alejandro Albornoz (34).
Según las fuentes, la mujer tenía cuatro hijos, tres de una relación anterior, y el restante con Albornoz, con quien habitaba una casa en la parte trasera del terreno, mientras que en la parte delantera vive la hermana de ella.
De acuerdo a los voceros, todo comenzó cuando los familiares de Muñoz escucharon los gritos de auxilio y clemencia de la víctima, que decía «¡Ale, no!», y fueron hasta la casa del fondo para ver qué pasaba.
En esas circunstancias, estos testigos comenzaron a exigirle a Albornoz, que había sido denunciado por violencia doméstica por su propia madre, que saliera del inmueble o llamarían a la Policía, ante lo cual, él mismo se comunicó con el 911 para decir que había matado a su pareja.
Ante esta situación, el hombre quedó detenido, mientras que los pesquisas hallaron en ese cuartito las prendas de vestir manchadas con sangre y el arma homicida.
A su vez, los testigos presenciales refirieron que Albornoz era violento con Muñoz, que, en un comienzo de la relación, en 2020, fue más psicológica y verbal, pero que luego se tornó física, al punto que la mujer ocultaba las lesiones con maquillaje.
Un vocero judicial explicó a Télam que los testimonios apuntaron a que el hombre no dejaba que su pareja se viera con la familia de ella, y que esa situación era el principal detonante de la violencia ejercida por él, aunque la pareja no lo denunció nunca formalmente por temor.
De hecho, sobre Albornoz pesaba una restricción de acercamiento hacia su propia familia, a raíz de la denuncia efectuada por su madre.
En tanto, la autopsia al cuerpo de la víctima determinó que presentaba 24 heridas de arma blanca, la mayoría en la zona del tórax e, incluso, defensivas, en los miembros superiores.
Mientras que Albornoz quedó alojado en una sede policial y este lunes será indagado por el fiscal Daniel Ichazo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) descentralizada 1 de Berazategui, a cargo del expediente y quien ya les tomó testimonial a varios de los familiares directos de la mujer, presentes al momento del crimen.