Dos delincuentes le rompieron la ventanilla del vehículo en el que se trasladaba el dinero y se llevaron bolsos con $8 millones. En la huida dispararon contra el automóvil.
Los delincuentes dispararon contra una de las ventanilla del auto y bajaron. Tras romper el vidrio de una de las ventanillas baleadas y mientras las victimas estaban en shock, sustrajeron dos bolsos con 4 millones de pesos cada uno. Antes de escapar, dispararon contra el auto, de acuerdo a las primeras informaciones recolectadas por el Comando Radioeléctrico de la Unidad Regional II.
“Pidieron un móvil de auxilio por un robo. Tienen escoriaciones leves y presión alta. Ahora viene una unidad de mayor complejidad. Están bien”, dijo a Canal 3 uno de los médicos que acudió a Lavalle y Pellegrini para asistir a las víctimas del asalto.
Los dos ocupantes del Onix debieron ser asistidos por personal médico, debido a que estaban en estado de shock. Todo el episodio se desarrolló muy cerca de la sucursal de los supermercados que pertenece a la familia de la esposa del capitán de la Selección, en Lavalle al 2550.
Diego Santamaría, Jefe del Comando Radioeléctrico explicó a los medios de prensa que: “Salían del supermercado y se dirigían a un banco cercano. En Lavalle al 1700 fueron abordados por un auto blanco, les rompen el vidrio y se llevan las mochilas con la alta suma de dinero, aproximadamente 8 millones de pesos, según dijeron las víctimas”.
“En el hecho participó un vehículo seguro, no podría imputar a más personas. El disparo, aparentemente, fue cuando el auto intentó escaparse. Hay cámaras en la zona, hacemos el relevamiento para establecer la mecánica. Por Lavalle hay una vaina servida que será secuestrada por la Agencia de Investigación Criminal”, declaró.
En tanto, la empleada del supermercado que acompañaba a Scaglia en el momento del robo, relató: “Íbamos del comercio hacia el banco para depositar dinero. Nos rompieron los vidrios y se llevaron los bolsos. Un auto había seguro, porque los vi subirse a uno. En el momento en el que arrancó todo solo escuché impactos. Cuando nos bajamos vimos el impacto de bala”.
“Salimos con los bolsos cerrados. No nos dieron información exacta de cuánto había. Lo dejábamos en el banco y nos volvíamos. No es algo que hacemos siempre. La que manejaba era Agustina, la dueña de la empresa. Ella intentó acelerar, pero teníamos un auto adelante y no pudo, por eso lo golpeó al auto”, finalizó.